Grandes Cambios

Es curioso cómo cada cierto tiempo antiguos tabús mueren y otros nuevos aparecen. Quienes han dedicado su vida a estudiar la historia puede dar testimonio sobre el languidecimiento de civilizaciones enteras que han dado paso a un nuevo orden. El ciclo se inicia y termina incesantemente. Las dos Alemanias se unificaron y el muro cayó, Juan Pablo II pidió perdón al judaísmo, la mujer es un miembro activo de la sociedad, los diferentes biotipos se mezclan incesantemente por la migración, las culturas se fusionan a través de la globalización… hay grandes cambios. Todo tiene un lugar en el universo y mantiene su esencia hasta que se desplaza para convertirse en algo diferente y aún esto tiene también su lugar en el cosmos. Nada cambia y todo cambia. Las cosas son lo que son ni menos ni más y lo tradicional convive con las tendencias nuevas. Si hubieron transformaciones sociales tan importantes en este último siglo ¿Qué habremos de esperar de lo que suceda en la tuna hoy?

Sinlogismos Fraternales

En el mundo del negro mester es común escuchar frases como “la tuna es una hermandad” pero no siempre esta máxima es observada. Siendo simples mortales naturalmente surgen, como en todos lados, desacuerdos y rivalidades entre tunas. Más allá de estos vanos infortunios, de los que puede preciarse de haber pocos, lo que hermana en la tuna, aún entre aquellas con profundas diferencias, es la similitud de vivencias en el seno del ejercicio del ars tunae. Aún en el anonimato que da la vastedad del universo de tunas en el mundo, las experiencias los identifican. Es un sentimiento único. Puede haber miles de pícaros en el mundo, al igual que bebedores, galantes o músicos. Todos contados por docenas. Pero es en las aulas de la universidad donde se forja un tuno.